La nueva factura de la luz es ya una realidad, y está generando mucho desconcierto al respecto de cuál será la subida y cuanto acabaremos pagando.
Antes de entrar en detalle en los términos que han cambiado al respecto de la factura de la luz, vamos a explicar los motivos por los cuales se producen estos cambios. Principalmente se debe a la subida del precio por emisión de CO2, Los derechos de emisión de CO2, es el precio que pagan las centrales eléctricas de gas y carbón para poder emitir gases contaminantes en la atmósfera. Otro de los motivos es que Francia, primer productor de energía nuclear ha paralizado la producción en varias centrales nucleares, reduciendo alrededor del 80% de su electricidad, por lo que ha necesitado importar la luz a España, entre otros países. Este incremento de demanda hace que los precios tiendan al alza en el mercado mayorista.
¿Qué ha cambiado en la factura de la luz?
Ahora que ya sabemos el por qué de los cambios, vamos a exponer en qué consisten estos cambios.
Respecto al precio por kilovatio que consumimos, se establecen tres períodos horarios por los que pagaremos un peaje de acceso distinto:
Punta: de 10:00 a 14:00 h. y de 18:00 a 22:00 h.
Llano: de 08:00 a 10:00 h., de 14:00 a 18:00 y de 22:00 a 00.00 h.
Valle: de 00.00 a 08.00 h. y los fines de semana y festivos nacionales.
Si bien, en total con esta medida dispondremos de un 15% de horas más baratas que hasta ahora, para aquellos consumidores que no logren trasladar parte de su consumo a estas horas más baratas o que hasta la fecha ya tuvieran aplicada una tarifa de discriminación horaria, saldrán perjudicados con esta nueva medida.
En resumidas cuentas, en general notaremos una subida en nuestros costes de energía. De ahí la importancia de buscar alternativas para evitar pagar más en la factura de la luz.
Todos los expertos en energía señalan que una de las mejores medidas para lograrlo es aportar por las energías de autoconsumo. Apostar en estos momentos por la instalación de placas solares de autoconsumo no solo supone un ahorro desde el primer día del coste de energía, además se trata de una apuesta de futuro, ya que conforme se va amortizando la inversión la capacidad de ahorro es mucho mayor.